Los estándares web nacieron con la finalidad de estandarizar todos los tipos web de internet. En los primeros años de vida de Internet, cada programador creaba su página como quería, y esto daba muchas dificultades para coordinarse con los distintos tipos de navegadores.
Estándares web como JavaScript, CSS o HTML surgieron para hacer que todos los sitios web sean creados bajo un mismo abanico de normas, para que así no haya problemas con las diferentes versiones del sistema o del navegador que usemos, y que así todos los usuarios puedan acceder a una web sin necesidad de crear una web diferente para cada navegador, que era el problema inicial.
Por otro lado, el World Wide Web Consortium es un consorcio internacional que tiene como objetivo la meta que buscan los estándares, que toda la web se rija bajo unas tecnologías uniformes y que así todo el mundo sea capaz de acceder.
La sede del W3C en España se encuentra en el Parque Científico Tecnológico Informático de Gijón.
